La CGT condena el operativo de seguridad desplegado por el Gobierno Nacional en los alrededores del Congreso, instando al cese de la represión y garantizando la libertad de protesta. La central obrera denuncia el uso de un «protocolo anti protestas» considerado ilegal por organismos internacionales.
La Confederación General del Trabajo (CGT) emitió un comunicado repudiando el operativo de seguridad implementado por el Gobierno Nacional en los alrededores del Congreso y exigiendo el cese de la represión. La central obrera expresó su preocupación por el uso de un «protocolo anti protestas», previamente declarado ilegal por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización de Naciones Unidas (ONU).

En el comunicado, la CGT sostiene que el despliegue represivo atenta contra la libertad de protesta y la paz del pueblo argentino. Señala que el Gobierno nacional ha iniciado su gestión violando reglas y procedimientos constitucionales, desconociendo leyes y promoviendo la violencia para infundir temor en la sociedad.
La central obrera recuerda experiencias pasadas en las que se intentaron implementar doctrinas similares, destacando que estas han resultado en fracasos con consecuencias perjudiciales para la mayoría de la población y la soberanía del país.