Santiago “Tato” Algorta reflexionó sobre su estrategia en la recta final de Gran Hermano: “Mi fortaleza fue la templanza»
En un nuevo paso por el confesionario, Santiago “Tato” Algorta analizó su recorrido dentro de la casa de Gran Hermano y compartió su estrategia sobre la etapa decisiva del certamen. El participante uruguayo habló con franqueza sobre su forma de jugar y las tensiones que generó con algunos compañeros.
“Estoy feliz y ansioso. Es una placa importante a futuro y como no tengo placas recientes, es como que estoy más ansioso que otras veces”, expresó Algorta, en referencia a su situación actual en el programa.
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Durante la charla, el concursante recordó el enfoque que propuso desde su ingreso al reality. “Dije en el casting que mi estrategia no era que me quieran acá adentro. Sí buscar pinchar al otro, que se calienten, como dice la frase de que el que se enoja, pierde”, sostuvo. Con esta postura, explicó, buscó generar reacciones que le permitieran avanzar en el juego.
Sobre los momentos de mayor tensión, Algorta señaló: “Mi fortaleza fue la templanza. Decir las cosas de frente para que el otro se saque. Quizás sí me costó que otras personas me hayan querido comer porque se enojaron de verdad. No me victimizo porque me lo busqué”.
De cara a una posible definición, el jugador aseguró que no tiene intenciones de confrontar con su compañera Luz Tito en caso de que ambos continúen en competencia. “Ella obviamente hizo cosas mejores que yo”, reconoció, al tiempo que consideró que cada uno debe argumentar por qué merece ganar, sin entrar en confrontaciones directas.
A pocas semanas del final, la convivencia, las estrategias y las decisiones del público comienzan a delinear quién será el próximo ganador o ganadora de Gran Hermano.