Falsas Alarmas que Desafían la Rutina Escolar en Lanús
Las jornadas educativas se suspendieron temporalmente en el Instituto de Formación Docente Nº11 de Lanús debido a una amenaza de bomba que provocó un gran despliegue de fuerzas de seguridad. El incidente se produjo en la institución ubicada en la calle Ramón Cabrera 1900, y las autoridades actuaron siguiendo los protocolos correspondientes, con la participación de la División de Antiexplosivos de la Policía y el apoyo de personal de Defensa Civil.
El día de hoy, la tranquilidad en el Instituto de Formación Docente Nº11 en Lanús se vio interrumpida por una amenaza de bomba que llevó a la suspensión temporal de las actividades educativas. El incidente desencadenó un importante despliegue de recursos de seguridad para garantizar la seguridad de los estudiantes y el personal de la institución.
Siguiendo los protocolos establecidos en situaciones de esta naturaleza, la División de Antiexplosivos de la Policía se presentó de inmediato en el lugar, ubicado en la calle Ramón Cabrera 1900, y llevó a cabo los procedimientos de seguridad necesarios. Además, el personal de Defensa Civil brindó apoyo en la escena.
Después de una minuciosa inspección, se confirmó que la amenaza de bomba resultó ser una falsa alarma. Los estudiantes, una vez que se disipó cualquier riesgo, pudieron reanudar sus clases con normalidad, y la jornada educativa pudo continuar sin mayores inconvenientes.
Antecedentes: Amenazas de bomba en cinco escuelas de Lanús
Este episodio no es un caso aislado en la zona. En el mes de mayo, alrededor de las 10 de la mañana, se registró una situación similar en una escuela ubicada en el cruce de la calle Enrique Fernández con la avenida Remedios de Escalada, también en Lanús.
En aquella ocasión, una llamada telefónica generó alarma entre las autoridades de la escuela, desencadenando un amplio operativo de seguridad que involucró a la policía, la brigada antiexplosivos, el SAME, Defensa Civil, Bomberos y personal de tránsito. La escuela N°52, cercana al lugar, también fue evacuada como medida de precaución.
Después de dos horas de intensa actividad, el operativo concluyó sin que se encontrara ningún dispositivo explosivo. Una vez más, se trató de una amenaza de bomba infundada, y las actividades escolares volvieron a la normalidad.
Estos incidentes subrayan la importancia de mantener protocolos de seguridad y una respuesta coordinada para lidiar con amenazas de bomba, al tiempo que recalcan la necesidad de evitar la propagación de alarmas falsas que perturben la tranquilidad de las comunidades educativas en Lanús.
