El Gobierno despiden a funcionaria de la ANDIS tras polémica por terminología ofensiva «idiota», «imbécil» y «débil mental»
Desde el Gobierno de la Nación despiden a Miriam Améndola, funcionaria de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), luego de la controversia generada por la publicación de una resolución que contenía términos considerados ofensivos para referirse a personas con discapacidad. Améndola, quien iba a asumir el cargo de coordinadora de Fiscalización Médica, fue desvinculada tras la difusión de la Resolución 187/2025 en el Boletín Oficial, que definía como «idiota», «imbécil» y «débil mental» a personas con diferentes grados de discapacidad intelectual.
La resolución publicada el 16 de enero de 2025, causó un fuerte rechazo en diversos sectores, incluidos familiares y especialistas en discapacidad, al utilizar una terminología obsoleta y despectiva. La medida se encontraba en el Anexo 1 del documento, que establecía clasificaciones para personas con discapacidad intelectual en base a su edad. Así, la resolución indicaba que las personas de 0 a 30 años debían ser consideradas «idiotas», de 30 a 50 años como «imbéciles», y de 50 a 60 años como «débil mental profundo», mientras que aquellas de 60 a 70 años recibían la categoría de «débil mental moderado» y entre 70 y 90 años, «débil mental leve».
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La situación generó un repudio generalizado en la sociedad y, ante la magnitud del escándalo, el Gobierno decidió dar marcha atrás con la resolución. El ministro de Desarrollo Social, Diego Spagnuolo, quien es titular de la ANDIS, reconoció la gravedad de los hechos y detalló que las personas responsables quedaron desvinculadas, aunque la resolución también llevaba su firma. La desvinculación de Améndola fue la única medida anunciada por el organismo hasta el momento.
Duras críticas
La polémica resolución resultó rápidamente criticada por expertos como el Doctor Julen Bollain, quien calificó la decisión de «una barbaridad» y señaló que la utilización de tales términos viola los acuerdos internacionales contra la discriminación hacia personas con discapacidad.
El gobierno, ante la repercusión del caso, se vio obligado a revertir la normativa, subrayando su compromiso con los derechos de las personas con discapacidad y distanciándose de la terminología empleada en el documento.
Comunicado de la ANDIS
Luego de la controversia generada por la publicación de la Resolución 187/2025, que definía como «idiota», «imbécil» y «débil mental» a personas con discapacidad, la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) emitió un comunicado en el que buscó aclarar los términos de la polémica. A través de una misiva oficial, la entidad expresó que «la publicación de los términos en cuestión no tuvo ninguna intención discriminatoria, sino que se trató de un error derivado del uso de conceptos pertenecientes a una terminología obsoleta».
En el mismo comunicado, la ANDIS detalló que la resolución y su anexo se modificarán para adaptarse a los estándares médicos y normativos vigentes. De acuerdo con lo informado, los cambios se llevarán a cabo con el objetivo de garantizar que la terminología empleada esté alineada con las referencias internacionales, como la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11) y el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5).

Sin embargo, la agencia subrayó que esta corrección no implicará modificaciones en el baremo ni en los criterios de evaluación utilizados en la resolución. La ANDIS reafirmó su «compromiso con un sistema de evaluación justo, transparente y basado en criterios médicos y en un análisis integral de la situación socioeconómica de las personas», y aseguró que su principal objetivo es que las pensiones no contributivas por invalidez laboral se otorguen «a quienes realmente las necesitan».
La misiva de la ANDIS buscó calmar las aguas tras el repudio generalizado, al tiempo que reafirmó su compromiso con la mejora de las normativas vinculadas a las personas con discapacidad, procurando evitar errores similares en el futuro.