Su mamá contó el presente que están atravesando
Sonia, la esposa Carlos Loria, el prefecto asesinado en Lomas ayer, brindó declaraciones a los medios de comunicación. El día fatal, cumplían 28 años de casados. El oficial había pedido el día en la fuerza para poder celebrarlo junto a su esposa. Sin embargo, cinco delincuentes arruinaron todos los planes festivos, acribillándolo a balazos para robarle la camioneta.
Dentro que lo que expuso a los medios, se refirió a su hijo. «Me dijo que no puede vivir sin él, que no sabe como va a seguir». En ese sentido también dijo que el joven expresó: «no pude disfrutar a mi papá».
Sonia, contó que Carlos le dedicó toda su vida a la Prefectura Naval. Prestó servicio durante 25 años. Al momento de su asesinato, se encontraba haciendo un reparto de un emprendimiento que tenían juntos. Una verdulería familiar. «Mi hijo está totalmente destrozado. No tiene consuelo» sentenció.
Prefecto asesinado: el crimen
Al momento del asalto, el hombre se encontraba totalmente indefenso. Mientras circulaba a bordo de su camioneta Renault Duster realizando entregas de la verdulería familiar que tenía, fue interceptado sagazmente por cinco delincuentes en un Chevrolet Corsa color gris.
Los mismos se bajaron del vehículo y mediante amenazas intimidatorias a punta de pistola, lo instaron a bajar del coche. El prefecto se resistió e intento huir marcha atrás, sin embargo, las balas fueron más veloces.
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Con un estilo sicario y gángster, los cinco malhechores desplegaron una balacera infernal contra el auto, alcanzando a herirlo fatalmente en el tórax. Hoy, justo hoy, Carlos cumplía 28 años de casado con su esposa Sonia. Era padre de familia. Tenía dos hijos. Había pedido el día en la fuerza para poder celebrar su aniversario.