La hipótesis principal es que se trató de un ajuste de cuentas
Escalofriante. Un brutal crimen sucedió en Temperley donde a un hombre lo balearon en la cabeza. No fue un robo. Los sicarios enfrentaron a la víctima y sin mediar palabra, le dispararon. Acto seguido se dieron a la fuga.
El suceso tuvo lugar en la calle Iriarte al 1600. Fue una atrocidad que se cometió con total impunidad. Iriarte, es la calle donde está emplazada la Comisaría N°8 de Villa Galicia, a tan solo dos cuadras de allí. Sin embargo, para los asesinos, esto no fue impedimento ninguno.
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Intento de asesinato: lo balearon en la cabeza
La víctima se encontraba en su taller mecánico, trabajando en la reparación de autos. De un momento para otro, los sicarios irrumpieron violentamente en el lugar donde sin pronunciar siquiera una sola palabra. Uno de ellos bajo de la moto, le apuntó a la cabeza y le disparó. Fue una ejecución a sangre fría. Acto seguido, se subió nuevamente al rodado en cual ambos huyeron.
No obstante, a pesar de la brutalidad del disparo, el hombre no murió. Fue trasladado de urgencia al Hospital del Bicentenario de Monte Grande. Allí permanece en muy grave estado. Las autoridades descartaron toda posibilidad de intento de robo. Atribuyen el hecho a un ajuste de cuentas. Los familiares por su parte, piensan lo mismo.
En plena luz del día, a tan solo una cuadra de la comisaría, siendo registrados por las cámaras de seguridad y en el medio de la vía pública, el intento de asesinato fue llevado a cabo por los delincuentes con total tranquilidad y profesionalismo.
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La Unidad Funcional de Instrucción N°5 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora lleva a delante la investigación. Caratuló la causa como «Homicidio en grado de tentativa». Los autores no lograron ser identificados ya que a pesar de haber quedado filmados por una cámara de seguridad, tenían casco.
