La fuerte tormenta que cayó sobre la región este fin de semana fue devastadora para algunos barrios, y Villa Lamadrid fue uno de los más perjudicados por estar rodeados de arroyos. Emilce, su esposo y sus tres hijos, fueron una de las tantas familias afectadas por el agua. Se le inundó su casa, perdió todo, pero por un malentendido nadie la quiere ayudar.
Entre decenas de fotos y videos en redes sociales, una foto de unos niños sobre una cama en medio del agua, conmovió a todos. «Eran las 3 de la mañana y ya tenía la casa llena de agua. Mis hijos estaban durmiendo y nos dimos cuenta cuando empezó a explotar la electricidad», comenzó a contar Emilce.
«Y no sabíamos ni cómo hacer por el tema de que los nenes estaban en la cama, estaba lleno de agua y todo con electricidad»
Según nos contó que el agua había empezado a entrar durante la tormenta, pero nada preocuapante. Una vez que paró la lluvia, el agua bajó. Pero durante la madrugada del sábado, el río Matanza – Riachuelo y sus arterias, los tres arroyos que rodean a Villa Lamadrid, se habían rebalsado. Su casa está ubicada en Cañuela y Tabano, a pocos metros de un arroyo y fue afectada por la subida.
«Perdimos todo, perdimos la mercadería que compramos el viernes. Nosotros cobramos, fuimos a comprar mercadería y perdimos todo. Perdimos azúcar, yerba, mate cocido. Perdimos las dos heladeras, que una enfriaba y la otra congelaba, pero se perdieron las dos. Perdimos secarropa, lavarropa, tres sommiers de dos plazas. Como yo tengo tres nenes, tienen un sommier grande para dormir».
«Y se perdió la tele, se perdió toda la mayoría de la ropa, todo. Porque se empezó a romper los muebles y se empezaron a caer. Y como yo no tengo piso de material, se quedó toda la ropa en el piso y se pudrió todo. Mejor dicho, porque como el agua era del Riachuelo, quedó todo con olor feo y lleno de barro. Se pudrió todo, no pudimos rescatar nada. Se perdió zapatillas, los útiles de mis hijos, la frazada»
«Todo lo que teníamos, todo se perdió. Todo lo que con esfuerzo trabajamos, porque nosotros no cobramos asignación, no cobramos alimentación, nada. Porque trabajamos en blanco, pero para decir que ganamos mucho, nada. Pero si no trabajamos, nadie nos va a dar de comer. Y ahora tenemos que ver cómo vamos a retomar, porque tenemos que pagar un préstamo en el banco también, y ahí se nos va la mayoría de la plata».
La casa de nosotros no es de material, sino todo de madera. Y con el agua se está pudriendo todo»
Emilce, desesperada, pidió ayuda en redes sociales, donde en un primer momento se solidarizaron con ella y con la situación que atravesaba con su familia. Pero todo cambió de un momento a otro. De repente, varios vecinos comenzaron a atacarla y a acusarla de mentirosa o estafadora.
Una publicación previa al desborde del arroyo, donde ella buscaba un celular usado para comprar, fue el causante de la discordia. Yo lo había puesto en un grupo de compra y venta, el viernes a la noche, el viernes a la noche y tenía que esperar que el administrador me la acepte. Y me la aceptó el sabado y como me la aceptó tarde, la gente pensó cualquier cosa».
«Cuando nos inundamos no pensamos en comprar celular, no pensamos en nada. Pero era 15 mil pesos que yo trabajo y tenía para comprar solamente un celular de 15 mil pesos, no es que somos millonarios ni nada por el estilo. Y si tengo que poner los datos de mis hijos, pongo todo».
«No cobramos asignación, no cobramos alimentar, no cobramos nada, no cobramos ni un plan nosotros. Ni siquiera cobro la pensión, que a mí me hace falta la placa de la cabeza, hace cuatro años que la estoy esperando y todavía nadie viene a verme».
«Por culpa de esa publicación nadie quiso ayudar, nadie. Se tiraron más para eso que para ayudarnos. Empezaron a criticar y no nos ayudaron nada. Hasta el día de hoy no vino ni siquiera el delegado. Porque me mandó un mensaje diciéndome que ya no hay más cupón para los colchones ni nada por el estilo, ni para la mercadería».
Si queres colaborar con la familia, podes comunicante con éllos o visitarlos.