Tensión en la casa de Gran Hermano por recreación de El Chavo del 8: los cruces por el protagonismo ya son moneda corriente
Una nueva consigna artística generó controversia por el protagonismo en la casa de Gran Hermano, donde los participantes debían recrear escenas de la icónica serie mexicana El Chavo del 8. Lo que comenzó como una propuesta lúdica derivó en una serie de desencuentros entre los jugadores, a partir del reparto de roles y las opiniones.
El primer foco de conflicto surgió cuando Sandra Priore le preguntó a Eugenia Ruíz si le molestaba que ella asumiera el personaje del Profesor Jirafales, (Rubén Aguirre). La santiagueña se mostró conforme con la decisión, y Santiago “Tato” Algorta cedió su papel de “maestro longaniza” y asumir el rol de director.
Lee también:
- Polémica en GH por un comentario sobre la tragedia de los Andes
- Gran Hermano: así fue la adaptación de High School Musical

Por su parte, Lourdes Ciccarone expresó su malestar al interpretar a Don Ramón (Ramón Valdés). Según explicó, consideraba que “aquellos que son actores y actrices deberían ocupar los roles más complicados”, en alusión al perfil de algunos de sus compañeros.
El pedido de Eugenia de interpretar a La Chilindrina (María Antonieta de las Nieves) fue otro punto de tensión. Katia Fenocchio manifestó: “Me da bronca que la mina esté en todas”, en referencia a la participación de Ruíz en representaciones, como Esperando la carroza y Casados con hijos. En línea con otras ocasiones, Katia no disputó el personaje de manera abierta, y Sandra le hizo notar su pasividad.
Finalmente, la propia Katia respondió a las críticas. “Me da bronca que me venga a tildar de caprichosa o vaga, y si a ella no le dan el rol que quiere, no hace nada. Además, Ulises duerme más que yo y nadie dice nada. Ese título que me ponen a mí ya me cansa”, expresó la participante, visiblemente molesta.