La desregulación del Gobierno afecta a cartoneros, quienes ven desplomarse el valor de su materia prima
La desregulación implementada por la gestión de Javier Milei ha generado un grave impacto en el sector de los cartoneros, quienes han experimentado una caída del 70% en el precio del cartón que recolectan. Este fenómeno ha tenido lugar desde julio del año anterior, cuando se autorizó la apertura gradual de la importación de residuos no contaminantes.
Este cambio afecta directamente a una actividad de recolección de residuos urbanos, que abarca entre el 60% y el 70% del total recuperado en las calles. El valor del cartón ha pasado de 300 pesos por kilo a tan solo 100.
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De acuerdo a información del sector, los cartones importados se comercializan a precios significativamente inferiores a los que pueden ofrecer las cooperativas argentinas. Esto se debe a que, en enero de este año, el Gobierno nacional autorizó la importación de materiales reciclables, incluyendo cartón recuperado.
Algunas industrias compran bobinas de cartón o papel del exterior, lo que provoca una drástica baja en el precio de la materia prima. A nivel nacional, el 64% de la población separa materiales reciclables en sus hogares; sin embargo, en el conurbano este porcentaje desciende al 56%.
Argentina genera aproximadamente 45,000 toneladas diarias de residuos sólidos urbanos. Esto que equivale a más de 11 millones de toneladas anuales, con un consumo per cápita de alrededor de 1,15 kg por día. En este contexto, coexisten aquellos que separan residuos de manera individual y los que llevan a cabo una labor formal e inclusiva en la recolección.
La línea que los distingue es tenue: algunos separan insumos para el sistema de recuperación, mientras otros buscan materiales en contenedores para subsistir.
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA) ha tomado medidas severas contra quienes revuelven en los tachos, estableciendo multas de hasta 900.000 pesos. Los cartoneros han respondido señalando que no contaminan, sino que reciclan, ahorrando millones al Estado y contribuyendo al cuidado del medio ambiente.
Depreciación
Son aproximadamente 200 mil cartoneros que representa la Federación Argentina de Cartoneros, Carreros y Recicladores, completar la canasta básica alimentaria (CBA). Para ellos, implica recuperar actualmente siete veces más materia prima que hace dos años.
No obstante, sus oportunidades laborales se han visto limitadas: muchas cooperativas han cerrado. El Gobierno de la Ciudad suspendió el sistema de transporte en colectivo que utilizaban para acceder a la Capital desde hace 18 años.
El jefe de Gobierno, Jorge Macri, justificó la decisión de eliminar el servicio en el vínculo de algunas cooperativas con el dirigente social Juan Grabois.
Esta situación afecta a alrededor de 3.000 recicladores urbanos que se trasladan a CABA desde lugares como Villa Fiorito o Ingeniero Budge. Ahora deben destinar el 20% de sus ingresos a viáticos, dado que el incentivo que reciben por su labor no excede los 390.000 pesos.
Los cartoneros denuncian que esta medida afecta de manera «inviable» su traslado y representa una vulneración grave que pone en riesgo miles de empleos, según declaraciones de FACCyR.
BA Recicla
Más de 6 mil recuperadores urbanos, organizados en 12 cooperativas, prestan servicio de recolección diferenciada por los barrios, dependientes del Programa BA Recicla del Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana.
Algunas cooperativas tienen sede en la Ciudad, pero muchas están en la Provincia, lo que implicaba hasta ahora un transporte diario garantizado por el Gobierno para sus trabajadores. Sin embargo, el GCBA considera que ese servicio era un «privilegio» para un grupo selecto de cooperativas, mientras que otros trabajadores no gozaban de ese mismo beneficio.
Desde la cooperativa Amanecer de los Cartoneros, parte del Movimiento de Trabajadores Excluidos, expresaron que ahora deben afrontar el costo del traslado con salarios que han disminuido por la baja en los precios de los materiales debido a la apertura de importaciones.
Desde la Dirección de Espacio Público argumentaron que el costo del transporte, que ascendía a 6 mil millones de pesos anuales, será redirigido a obras de infraestructura en los centros de reciclaje y mejoras en las rutas de recolección.
Las cooperativas agrupadas en la FACCyR también han señalado que el incentivo salarial actual de los cartoneros es de 390 mil pesos, y que al eliminar el transporte, se verán obligados a dedicar un 20% de sus ingresos a costos de traslado.
Esta pérdida de clientes para materiales recuperados impacta, a su vez, en los ingresos que podrían obtener por cantidad recolectada. Un reciclador comentó que recibió 31 mil pesos por 450 kilos de cartón.
De las doce cooperativas que colaboran con el gobierno porteño, Amanecer de los Cartoneros es la única que recupera 3.000 toneladas mensuales de materiales que evitan su disposición en rellenos sanitarios.
Legislación
El trabajo de los recuperadores se encuentra respaldado por diversas leyes locales, incluyendo la Ley N°992, que establece la figura legal del cartonero desde 2002.
A lo largo de los años, se han añadido diversas normativas que amplían la cobertura de derechos de estos trabajadores, así como el marco legal que permite que más de 6 mil personas realicen su labor recorriendo los barrios en busca de materiales reciclables. La FACCyR busca fortalecer la organización de cartoneros, carreros y recicladores para obtener reconocimiento y derechos sociolaborales.
Se proponen sistemas de reciclado inclusivos a nivel nacional, con el objetivo de instalar 120 sistemas municipales de reciclado en principales ciudades, generando 20.000 nuevos puestos de trabajo y desarrollando nodos para la comercialización de materiales reciclables.
Fuente: Noticias Argentinas ↗