La Provincia de Buenos Aires recibe reconocimiento internacional por su liderazgo en salud mental.
La revista científica The Lancet ha destacado a la Provincia de Buenos Aires como un modelo a seguir en reformas de políticas de salud mental, a pesar de enfrentar recortes presupuestarios y el aumento del malestar social y psicológico, exacerbado por la pandemia de COVID-19 y problemas estructurales como la pobreza y la desigualdad.
La investigación, liderada por la autora Alejandra Barcala, directora del Doctorado de Salud Mental Comunitaria en la Universidad Nacional de Lanús, señala que el sector sanitario a nivel nacional ha sido severamente impactado por ajustes fiscales. “Entre diciembre de 2023 y diciembre de 2024, recortes significativos llevaron al cierre de departamentos de VIH/SIDA, salud sexual y epidemiología, así como al desmantelamiento de programas como ENIA y Médicos Comunitarios”, añade Barcala. Además, la salida del país de la OMS podría comprometer la cooperación internacional y el acceso a vacunas y sistemas de vigilancia.

El estudio indica que la salud mental ha sido “afectada de forma desproporcionada”, manifestándose en intentos de reforma de la Ley Nacional de Salud Mental N.º 26.657, cierre de servicios territoriales y despidos de profesionales, entre otras medidas. Sin embargo, resalta los logros de la Provincia de Buenos Aires en este ámbito, como el cierre de centros psiquiátricos de larga internación, la creación de viviendas con apoyo, y la expansión de equipos comunitarios que fomentan la inclusión social y laboral.
Malestar social generalizado
El artículo también revela preocupantes estadísticas sobre la salud mental en Argentina. Entre abril de 2023 y abril de 2025, se registraron 15.807 intentos de suicidio en todo el país, principalmente en adolescentes de 15 a 19 años. En 2024, los hospitales públicos de la Provincia de Buenos Aires, que alberga el 38% de la población argentina, reportaron 45.785 hospitalizaciones relacionadas con salud mental, lo que implica un aumento del 9% en comparación con 2023 y del 63% respecto a 2019.
Hasta junio de 2025, más de la mitad de las camas de emergencia estaban ocupadas por personas que padecían angustia aguda, crisis por consumo de sustancias o intentos de suicidio.
El trabajo de la Provincia
Por otro lado, la investigación resalta los avances logrados en la Provincia entre 2019 y 2023, como el cierre de 18 de los 35 pabellones psiquiátricos y el alta de más de la mitad de las personas que estaban institucionalizadas, en el marco del proceso de desmanicomialización. Los subsidios de alta aumentaron un 553% y la disponibilidad de camas de salud mental en hospitales generales creció un 60%.
Además, se mejoró el acceso a medicación y se incorporaron 16 Centros Comunitarios de Salud Mental y 2 unidades residenciales para abordar el consumo problemático de sustancias. Se añadieron cien nuevos profesionales al sistema y se implementó una línea directa de crisis, entre otras iniciativas.
La revista internacional concluye que los esfuerzos de la Provincia en salud mental constituyen una «política transformadora» y propone su modelo como escalable a nivel regional.
El artículo completo se puede consultar en este enlace.
Fuente: GPBA ↗