Como cada 7 de agosto se conmemora la obra y la devoción a San Cayetano: Fe y Esperanza en Tiempos de Crisis
Este miércoles 7 de agosto, miles de argentinos se reunirán para conmemorar a San Cayetano de Thiene, un santo cuya devoción se convirtió en un símbolo de esperanza para muchos en épocas de crisis económica y social. Ferviente defensor de la caridad y la justicia social, San Cayetano es conocido por su énfasis en proporcionar «pan, paz y trabajo» a todos, especialmente a los más necesitados.
San Cayetano nació en Vicenza, Italia, en 1480, en el seno de una familia noble. Sin embargo, eligió una vida de humildad y servicio, dedicándose a ayudar a los menos afortunados. Estudió teología y derecho en la Universidad de Padua, y se destacó por su devoción religiosa y su compromiso con la reforma de la Iglesia. Fundó la Orden de los Clérigos Regulares, conocidos como «teatinos», cuyo enfoque era la vida apostólica, la enseñanza y el servicio a los necesitados.
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El legado de San Cayetano como santo de la caridad y el trabajo ha perdurado a lo largo de los siglos. Su énfasis en la provisión de «pan, paz y trabajo» lo ha convertido en un modelo inspirador de compasión y ayuda. Muchas personas recurren a él en busca de intercesión en asuntos laborales y en la búsqueda de estabilidad económica.
San Cayetano en Argentina
La devoción a San Cayetano en Argentina tiene una historia significativa, especialmente durante la crisis económica de la década de 1930. El Padre Domingo Falgioni, párroco de Liniers entre 1928 y 1938, promovió intensamente esta devoción enviando estampas del santo a las personas de la guía telefónica. Estas estampas, que mostraban a San Cayetano con una espiga de trigo, simbolizaban el pan, un recurso escaso debido a la crisis. Falgioni también llevó a cabo una campaña en el diario católico «El Pueblo», destacando la importancia del santo como proveedor de pan y trabajo.
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Una de las historias más emblemáticas de esta devoción cuenta cómo, en respuesta a una severa sequía, los fieles realizaron una rogativa a San Cayetano pidiendo lluvia. Milagrosamente, la lluvia llegó y el trigo volvió a crecer, consolidando así la asociación del santo con las espigas y la provisión de alimento.
La devoción a San Cayetano promueve la idea de solidaridad y comunidad. Sus seguidores se unen en la búsqueda de soluciones para los desafíos económicos y sociales que enfrentan. La importancia de ayudar a los demás y de formar una comunidad que se preocupa por el bienestar de todos es una lección valiosa en un mundo cada vez más interconectado.
Oración a San Cayetano
Tal como señala la Agencia Católica de Informaciones- ACI Prensa, esta es la oración para pedirle a San Cayetano por cualquier necesidad:
¡Oh glorioso San Cayetano! Aclamado por todas las Naciones; Padre de Providencia, porque con portentosos milagros socorres a cuantos te invocan con fe en sus necesidades. Te suplico me obtengas del Señor oportuno Socorro en las angustias presentes y sea ello prueba de la bienaventuranza eterna. Amén.
Santísima Trinidad, ¡oh Divina Providencia! Concédeme tu clemencia, por tu infinita bondad, arrodillado a tus plantas, a Ti portento de toda caridad, te pido por los míos casa, vestido y sustento.
Concédenos la salud, llévanos por buen camino, que sea siempre la virtud que guie nuestro destino. Tú eres toda mi esperanza, eres el consuelo mío, en Ti creo, en Ti confío. Que tu Divina Providencia se extienda a cada momento para que nunca nos falte casa, vestido, sustento y los Santos Sacramentos en el último momento.