El «xeneize» no logra romper su racha en casa y todo se jugará en San Pablo
En un emocionante enfrentamiento en la Bombonera, Boca Juniors y Palmeiras se enfrentaron en la ida de las semifinales de la Copa Libertadores, y el resultado final fue un empate 0-0. El partido prometía una lucha intensa entre dos de los equipos más destacados del torneo, y no decepcionó en cuanto a emoción y drama.
El «xeneize» tenía la presión de ganar en casa para encarar con más tranquilidad el partido de vuelta en San Pablo, pero, a pesar de mostrar superioridad en el campo y tener varias oportunidades claras, Boca no logró romper la racha negativa que lo persigue en la Bombonera. Su última victoria en este estadio se remonta al 18 de agosto, cuando derrotó a Platense 3-1 en la Copa de la Liga.
El equipo argentino mostró una mejoría en su juego, pero le faltó precisión a la hora de definir frente al arco rival. Dos de los puntos más destacados en el lado de Boca fueron los jóvenes Valentín Barco y Ezequiel Fernández, quienes demostraron su calidad en el campo.
Valentín Barco, apodado «El Colorado,» ha dejado de ser una promesa para convertirse en una realidad destacada. Su versatilidad en la cancha y su capacidad para crear oportunidades lo convierten en un jugador valioso para el equipo. Por otro lado, Ezequiel Fernández, conocido como «Equi,» se destacó cuando el equipo lo necesitaba más, asumiendo un papel importante en el mediocampo.
En contraste, Palmeiras, considerado por muchos como uno de los rivales más formidables de la Copa, demostró su estilo de juego característico. A pesar de no jugar con lujos, el equipo brasileño sabe cómo esperar su momento y aprovechar las debilidades del adversario. Presionaron constantemente en campo rival, aunque mostraron ciertas vulnerabilidades defensivas cuando Boca atacó, especialmente al final del primer tiempo.
En la primera mitad, Boca fue superior a Palmeiras y tuvo varias oportunidades para abrir el marcador. Sin embargo, el arquero Weverton y la falta de puntería en la definición evitaron que los argentinos se adelantaran en el marcador. El juego se desarrolló como un enfrentamiento estratégico, donde ambos equipos ajustaban sus movimientos en función de las acciones del otro.
Después de los primeros 25 minutos, Boca continuó siendo peligroso, especialmente con Valentín Barco como su figura desequilibrante. Sin embargo, a pesar de la presión, no lograron concretar ninguna de sus oportunidades.
El segundo tiempo vio una disminución en el ritmo de juego por parte de Boca, aunque tuvieron ocasiones para anotar. La salida de Barco y «Equi» Fernández afectó la dinámica del equipo, y a pesar de los esfuerzos por parte de los suplentes, no se logró romper el empate.
El partido concluyó con aplausos tibios por parte de la afición, con un sentimiento de desazón debido a las oportunidades perdidas. La actuación de jugadores como Edinson Cavani, quien tuvo control con el balón pero no logró anotar, y Guillermo «Pol» Fernández, que estuvo por debajo de su nivel habitual, dejaron un sabor agridulce en la afición de Boca.
El resultado de este partido deja todo abierto para el enfrentamiento de vuelta en San Pablo, donde se decidirá qué equipo avanzará a la final de la Copa Libertadores. Boca Juniors deberá buscar una victoria en territorio brasileño si quiere cumplir su objetivo de conseguir su séptima Libertadores.
El próximo desafío para Boca será el superclásico ante River Plate el próximo domingo en la Copa de la Liga Profesional, antes de concentrarse en la revancha contra Palmeiras, que promete ser un enfrentamiento emocionante. El ganador de esta serie se enfrentará al clasificado entre Internacional de Porto Alegre y Fluminense en la final de la Copa, programada para el 4 de noviembre en el estadio Maracaná.
Alineaciones:
Boca Juniors: Sergio Romero; Luis Advíncula, Jorge Figal, Marcos Rojo y Frank Fabra; Cristian Medina, Guillermo Fernández, Ezequiel Fernández y Valentín Barco; Miguel Merentiel y Edinson Cavani. DT: Jorge Almirón
Palmeiras: Weverton; Marcos Rocha, Gustavo Gómez, Murilo Cerqueira y Joaquín Piqueréz; Gabriel Menino, Zé Rafael, Mayke y Raphael Veiga; Artur y Rony. DT: Abel Ferreira.
Cambios en el segundo tiempo:
Boca Juniors: Nicolás Valentini por Rojo, Lucas Janson por Barco, Darío Benedetto por Merentiel, Jorman Campuzano por Guillermo Fernandez, Exequiel Zeballos por Ezequiel Fernández.
Palmeiras: Luis Guilherme por Artur, Richard Rios por Menino, Fabinho por Ze Rafael, Endrick por Rony, Breno Lopes por Mayke.
Amonestados: Advíncula y Benedetto (Boca Juniors), Ze Rafael (Palmeiras).
Cancha: Estadio La Bombonera.
Árbitro: Wilmar Roldán (Colombia).